NUESTRA HISTORIA

1975

En 1975, Lucia Hiriart, esposa de Augusto Pinochet, creó la Fundación Nacional de Ayuda a la Comunidad FUNACO, con el objetivo de abrir centros abiertos para atender a los niños de los miles de hogares golpeados por la cesantía y la pobreza. FUNACO tenía una mirada asistencial, no existía igualdad en la atención en los distintos centros abiertos, ni preocupación por el desarrollo intelectual, social y nutricional de los párvulos. Las trabajadoras eran contratadas a través de los programas Plan de Empleo Mínimo PEM y el Programa Ocupacional para Jefes de Hogar  POJH.

1990

En 1990, con la llegada de la democracia y la ratificación de los Derechos Universales del Niño en nuestro país, nace Fundación Integra. La creación de la Fundación significó una transformación de la antigua FUNACO, institución de carácter asistencial, a una educativa y profesional. Los antiguos centros abiertos se transformaron en jardines infantiles y salas cunas con educación integral, proyectos educativos, alimentación y capacitación. Estábamos convencidas que si la democracia regresaba a Chile, los derechos de las trabajadoras y trabajadores, tantas veces ignorados o despreciados, debían ser recuperados. Pero eran, las mujeres trabajadoras, quienes debían dar la lucha para reconquistarlos. Particularmente en Integra las condiciones laborales eran paupérrimas, habían bajos sueldos sin ningún tipo de beneficios y el maltrato hacia las trabajadoras y los trabajadores eran pan de cada día.

1993

1993 En abril de 1993 en un periodo de transición de la democracia en Chile y en nuestra institución. Un grupo de 65 valientes trabajadoras perdieron el miedo y se organizaron para formar un sindicato en la comuna de Renca en Santiago. En ese tiempo, los derechos sindicales estaban muy restringidos y se requería tener 250 socias para formar un sindicato, por lo que la Inspección del Trabajo desconoció la legalidad y fueron despedidas la presidenta de ese entonces Patricia González y la secretaria Jessica Camusett.  Ambas solicitaron asesoría a la Central Unitaria de Trabajadores CUT y tras una larga batalla en tribunales, se logró el reintegro de ambas dirigentes despedidas. Esa fue una primera victoria. Al volver a sus labores, las dirigentes trabajaron para lograr el quórum necesario y constituir el sindicato de forma legal tal cual lo exigía la dirección del trabajo. Para ello se inició un proceso de búsqueda y acercamiento con los sindicatos de las regiones que habían nacido espontáneamente. Fue una ardua labor convencer a las trabajadoras/es de romper con el temor, pero las dirigentes llegaron al convencimiento que sólo unidas podrían mejorar las condiciones de las trabajadoras y trabajadores y decidieron avanzar hacia la constitución de un sindicato de carácter nacional. En Valparaíso, se sumaron las dirigentes quienes habían creado una organización regional. En Talca, la compañera María Elena Vera, se sumó también al proyecto de sindicato nacional. Finalmente, en Osorno, la presidenta del sindicato regional, Mirtha Oyarzo se unió también a nuestra organización.

1993

1993 El 4 de Mayo de 1993 nace SINATI el sindicato no solo se constituyó para representar a las trabajadoras/es de un jardín o una región, sino que comenzó a tener alcance nacional, lo que significó unir a todas las trabajadoras/es en sus luchas por mayor dignidad y mejor trabajo. Con la constitución de nuestro sindicato se crea un referente para dar inicio a un proceso de negociación con la dirección ejecutiva de la Fundación Integra, cuyo objetivo principal es mejorar la calidad de vida laboral y familiar de todas las trabajadoras y trabajadoras a quienes representaba SINATI. En el transcurso de los años, y por nuestra ardua lucha en la calle comenzamos a lograr avances significativos en nuestras condiciones laborales y de remuneraciones, tras negociaciones año a año con la Dirección de Integra y los Gobiernos, de turno, negociaciones en las que fuimos incorporando reajustes a nuestros sueldos base, además de la incorporación de bonos para el mejoramiento de nuestras remuneraciones. Es importante reconocer los avances logrados. Las trabajadoras y trabajadores pasaron  a tener contratos de trabajo con derechos a previsión y salud los salarios se fueron  incrementando sustantivamente por sobre el sueldo mínimo. Conquistas que han sido fruto de nuestra unidad, organización y perseverancia que hemos dado por años en la calle. Cuando miramos atrás, vemos todo lo que hemos avanzado desde nuestros inicios como sindicato. Sin embargo, sabemos que aún queda mucho por hacer. Las trabajadoras y trabajadores de Integra realizamos funciones similares a otras instituciones que imparten educación inicial en nuestro país, por lo que es justo aspirar a la nivelación de las remuneraciones y condiciones laborales con Junji.

SINATI

SINATI cumplió 26 años de vida sindical con grandes sacrificios y esfuerzos, hemos crecido y hoy somos el sindicato más grande de Integra y el sindicato más grande de Chile liderado por mujeres, no lo dice SINATI, lo dice la Dirección del Trabajo. Es un enorme orgullo, pero también es un tremendo desafío. Hoy representamos a más de 8 mil trabajadoras y trabajadores de todos los estamentos a nivel nacional desde Arica a Punta Arenas. Nuestro único compromiso es trabajar para mejorar las condiciones laborales y de remuneraciones de nuestras socias y socios y sus familias. “SINATI CON LA FUERZA DE LA MUJER TRABAJADORA”